17 de febr. 2011

Y uno aprende...

Después de un tiempo
uno aprende la sutil diferencia
entre sostener una mano
y encadenar un alma,

y uno aprende
que el amor no significa acostarse
que una compañía no significa seguridad
y uno empieza a aprender...
que los besos no son contratos
y los regalos no son promesas
y uno empieza a aceptar una derrota
con la cabeza alta y los ojos abiertos,
y uno empieza a construir
todos sus caminos en el hoy,
porque el terreno de mañana
es demasiado inseguro para planes...
Y los futuros tienen una forma de
perderse en la mitad.

Y después de un tiempo
uno aprende que... si es demasiado
hasta el calorcito del sol, quema.
Así que uno planta su propio jardín
y decora su propia alma,
en lugar de esperar a que alguien le traiga flores.

Y uno aprende que realmente puede aguantar,
que uno realmente es fuerte,
que uno realmente vale,
y uno aprende y aprende...
y con cada adiós uno aprende

y con cada día... uno aprende.


J.L. Borges